El Sardinero - Jardines de Piquio

Los Jardines de Piquío se encuentran aproximadamente hacia la mitad del Paseo Marítimo del Sardinero, la zona más lujosa de Santander, entre las playas Primera y Segunda del Sardinero.

Es una plaza con zona ajardinada con palmeras y césped que tiene un mirador bajo una pérgola, sobresaliendo del paseo sobre la playa, por lo que hay unas vistas increíbles de toda la bahía, que se pueden contemplar desde bancos dispuestos a tal fin. Desde ahí se puede ver, hacia el lado derecho todo el paseo marítimo, el Casino, y al fondo la isla de Mouro y la península y el Palacio de la Magdalena; hacia el lado izquierdo la continuación del paseo y al final del mismo el campo de golf de Santander.

Desde su emplazamiento se divisa también el faro de Cabo Mayor y la costa hasta el cabo de Ajo.

El Sardinero - Jardines de Piquio

Historia de los Jardínes de Piquío

La pradera de Piquío fue acondicionada para uso público alrededor de 1925, cuando comenzó la reforma de esta zona de El Sardinero, a cargo del arquitecto municipal Ramiro Sainz Martínez. Piquío ha sufrido sucesivas transformaciones y después de la Guerra Civil los terrenos fueron acondicionados como jardines. La definitiva transforma ción que culminó con la construcción de rampas, escalinatas, plataformas y miradores junto con las pérgolas ornamentales completando así el armonioso conjunto se realizó en el segundo decenio del siglo XX. Pero, a pesar del pasado del tiempo, el trazado de los jardines coincide con el original.

El Sardinero - Jardines de Piquio

Los Jardines de Piquío han sido siempre punto de encuentro de amigos, enamorados y paseantes. Hace años eran iluminados únicamente en las noches estivales, cobrando entonces una vida propia al calor del verano. Palmeras, rosetas, parterres, escaleras, y sobre todo su punto más característico, la pérgola, sufrían una metamorfosis singular que era esperada con verdadera ansiedad por los santanderinos. El color y la luz nacían en aquel lugar que divide las playas Primera y Segunda. Los paseos nocturnos en tan bello marco no cesaban hasta la llegada del otoño, cuando de pronto, todo volvía a oscurecerse bajo el frío manto de la noche, hasta el año próximo.

El Sardinero - Jardines de Piquio

Afortunadamente, hace apenas unos años, el ayuntamiento santanderino decidió desarrollar un proyecto de iluminación permanente, con un esmerado diseño, que permitiera a estos jardines ser útiles y seguros en todas las noches del año. Al tiempo se iluminó la Primera playa del Sardinero y se acometieron diversas obras de remodelación, respetando su diseño primitivo. Así renacieron los nuevos jardines de Piquío con el atractivo aspecto que hoy ofrecen, especialmente de noche, y que son elogiados por cuantos forasteros los transitan y disfrutan. Cuentan que la Reina Dña. Sofía no pudo resistirse a sus encantos y ordenó parar el vehículo que la transprtaba al aeropuerto a la altura de Piquío, en una de sus visitas a la ciudad, para admirar con más detalle la belleza de este paraje.

Textos guiarepsol.com-diariomontanes.es-taborga.blogspot.com.es

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